lunes, 31 de enero de 2011

Ensayo sexto.Hivernacle.

Espacio y Tiempo

Y de pronto la casa es demasiado grande.
Tu madre y yo vaciamos tus armarios
y seguimos por mesas y anaqules,
de retrato en retrato, tus sonrisas.
De noche los espejos, bajo la luz eléctrica,
muestran con más relieve tu vacío.
Los muebles son ahora , más oscuros.
Por la escalera bajan la cálida baranda,
que aún recuerda tu pequeña mano,
y los peldaños que aún sienten
el roce de tus pasos. Y la casa,
grande y vacía ahora,
a su propio silencio mira y mira.

Joan Margarit

lunes, 24 de enero de 2011

Quinto ensayo. Hivernacle

Cuerpo dolorido después del entreno. La sexta me deja machacada. En el local los entrenamientos son perfectos para luego ponerme a trabajar. Pero hoy... me hubiera ido a casa si no hubiera sido por Pepito grillo que ha insistido en que abandonar es de cobardes. El resultado, positivo. Hoy ha sido día de tomar nota. De explorar, de trabajar con la imagen. De encontrar imágenes escondidas en el recuerdo. Hoy ha sido día de obedecerse y de entregarse, de dejar que la creación crezca como un hongo. Y de obedecer a lo que está creciendo. Hoy ha sido día de desechar formas y de encontrar dinámicas. Hoy ha sido un buen día. Al acabar el cuerpo dolorido transformado en alivio. Una bicicleta ... y una mano que deja que salga volando.

Spinning Away Andrés hoy me ha pasado el nombre de esta canción que siempre que la escucho me emociona. Llevaba días queriendo saber su nombre... pero debe de ser que hoy tenía que ser!!! Gracias!

sábado, 22 de enero de 2011

Il.lustració de Katherine Quinn

Esto es un hombre que se presenta ante un director de circo y le pregunta si no necesitaría por casualidad a un imitador de pájaros. -Pues, no- responde el director y, entonces, el hombre sale volando por la ventana.

Pina Bausch.


miércoles, 19 de enero de 2011

Cuarto ensayo. Hivernacle

La ausencia de la guitarra me hace recordar imágenes de la infancia. Acompañada de una Nana, la Nana que me hubiera gustado que hubiera sido y que nunca fue. Juegos de niña, de una niña alegre como un cascabel, como decía mi madre. Los dedos se llenaban de tiza al jugar a la Charranca. Su imagen pasea por mi memoria. Llegaba empapada a casa tras cazar renacuajos; ni las "katiuskas" eran suficientes para protegerme de la profundidad de los charcos. Nunca llegaba a salvarme cuando jugaba al Escondite, me daba miedo esconderme y que no me encontraran. En cambio... hacía unas paradas increíbles en el escondite inglés.
En casa me encantaba jugar a "Señoritas", con mi pizarra y mis muñecos imitaba cada gesto de mi profesora Araceli.
Ahora todas las imágenes son ordenadas, intento hacer lo que quiero hacer y no dejarme llevar por lo que sé hacer. La voz de pepito grillo me persigue... y yo intento que no me crezca la nariz ...

lunes, 17 de enero de 2011

Tercer ensayo. Hivernacle

Manos que trabajan artesanalmente. Manos en contacto con la madera. Manos que buscan. Manos que acompañan. Manos y más manos... Darte cuenta de tus manos, ser consciente de ellas... Manos que dibujan, manos que descansan ... mirarse las manos... manos que sostienen... manos acentuadas... manos que pasan a ser un mano a mano... primer día de mirada externa... primer día acompañada... primer día con Roberto. Afuera... un árbol lleno de algarrobas...

miércoles, 12 de enero de 2011

Segundo Ensayo. Hivernacle

Y de pronto haces sombras en el suelo.
Y te quedas embobado con la imagen.
Y la imagen va cambiando y va pasando el tiempo.
Y ya no es como antes.
Y al final desaparece.


lunes, 10 de enero de 2011

Primer ensayo. Hivernacle.

Como por una mirilla de una puerta... dejando que entres en la intimidad de un ensayo. Así me gustaría que pudieras estar ... Para eso, solo unas anotaciones, de este proceso que hoy día 10 de Enero comienza.
Espacio luminoso, acogedor e idóneo para crear. Voces de lejos que apenas escucho... no me molestan y es más me alegra estar en este solo sin estar sola.
Cuclillas... búsqueda de movimiento... Beirut sonando.
Mirada de manos... manos movidas por un fantasma...
Giros de cadera y cambio de ritmo.
Sillita de juguete.
Tubos invisibles en el suelo y la duda de si los piso o no...
Mi Morente que suena con sus Compases y Silencios... partitura de pies descalzos, inspirados en baile popular.
Calma y tranquilidad. Su presencia y su imagen me mueve. No duele.

jueves, 6 de enero de 2011

Hivernacle


Tras este paréntesis Navideño, nos volvemos a poner en marcha. De pequeña me encantaba la Navidad y no entendía porqué a mis padres no les gustaba. Me encantaba bajar a Madrid todo decorado con sus lucecitas navideñas. El día más esperado era cuando me cogía mi madre y me llevaba en autobús hasta el mismo centro abarrotado de gente. No cabía ni un alfiler... ella se agobiaba por la multitud y yo, no lo entendía. No entendía como el ambiente tan festivo para ella significaba un suplicio cuando para mí, era un fiesta. Veíamos Cortilandia, los autómatas que ponía cada año el Corte Ingles... los muñequitos se movían de forma precisa e iban cantando la tan esperada canción típica de Cortilandia. Cada año era de un tema diferente...
Cada año como un ritual, esperábamos el estreno de Disney, íbamos a un cine de la Gran Vía y disfrutábamos juntas de la película. La que queda todavía en mi retina como si fuera hoy, es El Rey León. Me acuerdo de la llorera que me entró cuando el padre del pequeño leoncito se desplomaba de un precipicio con una música abrumadora bajo la atenta y culpable mirada de su cachorro. Me acuerdo del miedo que me daba saber que los Reyes Magos entraban a mi casa... por muchos regalos que me trajeran. Me acuerdo de la multitud de barriguitas de un año, de la casita de Pin y Pom que tanto esperaba... y del año de los patines, cuando ya sabía que los Reyes no eran quien me habían dicho que eran... sino que mis padres eran los cómplices de los mismos.
Ese año todo cambió... ya no había que hacer una Navidad mágica... y desde entonces las Navidades las viví de otra manera. De un año a otro me hice mayor... y ya los regalos pasaron a no ser sorpresa. Decir que no me gusta la Navidad dicen ser el síntoma GRINCH ... pues si... tengo este síntoma ... dicen que cuando hay niños en casa todo cambia... que solo y para ellos haces que estas fechas sean mágicas ... Ahora ya ha pasado... un año más se acabó la Navidad. Con el nuevo año, suelen llegar los buenos propósitos... yo no tengo propósitos pero si he dejado cosas atrás... o por lo menos en eso estamos. Ahora que lo pienso... quizá esto es un propósito no? dejar cosas atrás... y pasar página. No lo sé, lo que si sé es que Una del Montón tiene un nuevo proyecto, proyecto porque se realizará en corto plazo... nos embarcamos en una nueva aventura cargadas de nuevas vivencias. Preparamos nuevo espectáculo... y desde aquí después del recogimiento Navideño empezamos a hablar de ello. Nos ponemos en marcha con Hivernacle. Empezamos los ensayos después de seis meses de gestación. Es momento de seguir caminando... es momento de transformar lo vivido en una nueva pieza. Es momento de volver a compartir ensayos. Es momento de creación. Es momento de encerrarse y de darle vueltas a las formas. Es momento de volver a vivir un nuevo proceso... es momento de seguir creciendo y es momento de bailar desde dentro...